El espíritu navideño se apoderó de Amy Winehouse, quien se pasó 6 horas recorriendo la tienda londinense Selfridges y comprando todo lo que entraba en su carrito.
Cual niño en juguetería, Amy arrasó con todo, desde de luces con música y renos de juguete hasta Papá Noeles bailarines. La cuenta total: 18 mil libras, ¡un sencillo para la cantante!
Pero no fué todo, los vendedores le recomendaron no instalar los objetos ella sola, por lo que tuvo que pagar un extra para que fuese alguien a su casa que realizara la instalación.